Autor Tema: Nádia Kygiarkos “Άγγελος των μαύρων φτερών“ Actualizado 22/04/11  (Leído 2066 veces)

NádiaEirenye

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Re: Nádia Kygiarkos “Άγγελος των μαύρων φτερών“
« Respuesta #15 on: Junio 24, 2009, 01:33:14 am »
Me alegra serte útil emot031

NádiaEirenye

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Re: Nádia Kygiarkos “Άγγελος των μαύρων φτερών“
« Respuesta #16 on: Julio 02, 2009, 06:29:09 pm »
Bueno aqui el final del capitulo 3  :emot012:




— Que la Simi va a rescatar a Nega, akri.—  protestó Simi por 4ª vez, dado que Acheron dijo que se quedarían en Katoteros todos los dioses. Y si él no va ella tampoco.
— Pues no hay trato yo voy, es mi maestra y no la dejaré allí.—  agregó Calista poniendo los brazos en jarra.
— Si Calista va, yo también voy.— contribuyó Kyra.
— Podéis protestar todas y decir que van pero os quedareis a las puertas.— intervino Savitar.— No se trata que vuestra voluntad, si no que Anhangá es un sicótico y ningún dios cruzará la barrera a su reino.
— Pues me es completamente indiferente yo lo intentaré — concluyo Calista.
— Allá tú, será tu nariz que dará contra la barrera.
— ¿Sigues aquí? — preguntó Alia mirando al Chthonian de pies a cabeza con desprecio.
— Bueno Acheron cualquier cosa que necesites… te jodes… y te las arreglas solito que no soy tu niñera.— dijo ignorando por completo a la cazadora y desapareció acto seguido.
— ¿Bueno nos vamos o qué?— preguntó Alia.
— Yo estoy mas que lista y además tengo prisa.— objetó Vicky.
Todos estaban poniéndose a camino cuando un Wow sonó en la sala.
— ¡Por todos los dioses!¿Eso que es?— dijo Dreamara desde su posición de llegada, —¿No me digáis que vais todos de incursión al Olimpo otra vez?—preguntó desconfiada.
— No Dreamy vamos de incursión al Anha… no sé que.— explicó la Cazadora.
— Bueno lo intentareis — dijo Acheron.
— ¿Es que dudás de mis habilidades atlante?— inquirió Vicky alzando una ceja.



Muchos destellos simultáneos después… Nueva Orleàns, planta 48 del edificio Oubliètte.

— Aquí es.— dijo Vicky situándose en la espaciosa habitación entre la puerta del baño y la cama.
— Yo no veo nada.— habló Calista.
Unos pocos “yo tampoco” sonaron el estancia.
— Bueno ahora ya sabemos que porque nadie irrumpe en los dominios de Sir Padre Paranoico.— alegó Dream.— Yo lo veo, Alia también, Vicky por supuesto lo ve, ¿Gise? ¿Roz?
— Yo veo un portal— contestó Roz.
Gise asintió en confirmación de que también era capaz de verlo.
— Pero chicas una cosa es verlo y otra distinta es por que os tome el portal, él detectara la raza que conozca y impedirá el paso a la misma.— informó Ash.
— La Simi lo intentará de todas formas.— enfurruñó la demonio.— No ve nada pero seguirá a la hadita.— dijo poniendo los brazos en jarras y cara altiva.
— Siiimi… — la regañó Ash.
Una a una fueron cruzando ó intentando pasar el portal. Gise aún que simple vista alcanzaba ver el portal y era una humana sin alma no fue capaz de cruzar el mismo.¿Interesante dato? Alia lo cruzó tranquilamente, seguida de Roz y Dream. La gran sorpresa fue que Kyra siendo una diosa había burlado tranquilamente la restricción. Siguiendo las instrucciones de Vicky, Caslista y Simi lo intentaron pero no lo lograron. 
— Vale la Simi no va, pero como vuelvan sin su Nega, me comeré a la hadita.— dijo mirando con ojos especulativos a Victoria.— La Simi nunca ha comido un hada, seguro que tiene buen sabor. ¿Sabrá a dios celta…?— siguió la demonio con su parloteo ante la mirada indignada del hada.
Al traspasar la barrera, Vicky la cerró tras si. Estaban en una especie de túneles de una tierra roja, pero parecían calles cubiertas ya que el suelo estaba adoquinado como en las viejas ciudades. Y estaba iluminados por un peculiar luz blanca, parecían pequeños trozos de una piedra resplandeciente. Caminaron hasta llegar a lo que aparentaba ser una ciudad subterránea.
Con aspecto inofensivo pero armadas hasta los dientes, no llamaron la atención debido la intrusión, si no debido a sus pieles de color claro. En el momento que entraron a una especie de plaza se desataron las alarmas, algo que causó unas carcajadas a Vicky.
— Ese tío es realmente sicótico, con manías persecutorias además,— dijo sonriendo. — Tiene una barrera que ni el mas poderoso dios ni el mas hábil chthonian podría burlar, demonios fieles y impredecibles en combate, y todavía pone unas alarmas electrónicas. 
Una marea de demonios oliendo a azufre las atacó. Se podría decir que se había estallado el infierno.
— ¿Y que sos vos ahora?¿Psicoanalista?¿ Psiquiatra?— inquirió Roz haciéndose oír por encima del ruido del metal chocando.
— Yo diría que está mas para loca de que para psiquiatra.— se burló Alia de la hada.
— ¡Pues mira quién habla!— gritaron la demás en unísono.
Era impresiónate como charlaban como si estuviesen tomando el té y no en mitad de una escaramuza.
— Al menos yo lo tengo asumido…— demonio muerto — y no… — pausa , decapitación — me avergüenzo de ello.
Todas se rieron.
— Ok, lo tienes asumido pero te olvidas de alertar a los demás.— habló Dream acabando con el ultimo de los tres demonios con los que luchaba.
— Bueno que os divirtáis tanda de locas que yo voy por la retenida. — dijo Vicky hiriendo a un demonio y sacándole información bajo una “agradable inducción”.


marodi80

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Re: Nádia Kygiarkos “Άγγελος των μαύρων φτερών“
« Respuesta #17 on: Julio 05, 2009, 02:11:44 am »
Qué bueno Nadia  :emot004:
Prácticamente es lo único que leo porque ya ni me acuerdo cuál fue el último libro que leí  :emot003: ¿Mencioné que detesto tener que presentar trabajos???  :emot003:

 :emot008:

NádiaEirenye

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Re: Nádia Kygiarkos “Άγγελος των μαύρων φτερών“
« Respuesta #18 on: Julio 05, 2009, 09:33:08 pm »
Gracias Marodi  :emot008: bueno aqui esta el Capitulo 4 espero que os guste.



Capitulo 4






Vicky cruzó la plaza en dirección a un castillo-mansión que había mas allá una alta verja de… ¿de que coño estaban hechas esa mierda? Bueno hasta aquí llegó la aventura de la pequeña Vicky por el Añaretà. Ya que Tylwyth había asomado la nariz a través de Vicky, ya no había motivos para que Victoria no usará los poderes de Tylwyth Teg. Transformándose en un hada con pequeños retoques de la que había sido en su día Tylwyth Teg.Aunque ya no llevaba la tunica lavanda que la caracterizaba ahora llevaba colores mas oscuros además él negro y el rojo… ¡le sentaban de muerte! Sus alas seguían siendo purpuras… jamás cambiaría el color de sus alas.
Victoria la hada, voló con su alas brillantes por encima de las verjas que eran una serie de pequeñas serpientes de fuego enroscadas entre si formando un intricado diseño parecía una obra celta. Estaría diseñada para impedir en paso a la mayoría de los seres pero no contaban con una hada, aun así Vicky era capaz de percibir el enorme poder que emanaba las mismas.
Completamente indiferentes a lo eran ellas o lo que querían los Keebets y los demonios rojos luchaban a muerte para proteger su tierra, simplemente acatando ordenes, teniendo en cuenta todo menos sus propios deseos ó personas.
”¿Se podría llamar a los demonios personas? ¿ó ese termino no se les aplicaba?” sé preguntó Vicky.
Independientemente de que si se les podría llamar personas ó no, había montones y montones de ellos. Y por más fuerte ó poderosa que fuese, sola no podría encararlos para llegar hasta su objetivo. Volar era una ventaja, pero no era la única que tenia el beneficio de ello, los demonios rojos también hacían algo similar pero lo suyo era mas como levitar que el hecho de volar en si. Por lo que ella tenía mejor velocidad y mayor libertad de movimientos. Aún así eran demasiados.
Desde dentro la verja sería menos difícil de manipular aunque eso no lo hacia menos complicado. ¿Ó si? ¿¡Diablos ella era o no era la puñetera hada que controlaba todos los elementos de su raza!? Con unos minutos de concentración esas pequeñas serpientes relucientes reposarían en el olvido. Todavía inconscientes de que faltaba una intrusa, ya que las demás los tenían un tantin ocupados y se dirigían en dirección al fragor de la batalla que les presentaban Dream, Alia, Roz y Kyra. Le daba una oportunidad de abrir la verja.
Vicky se concentró en convocar el aire alrededor del verja, atrayéndolo a otro lado ya que sin oxigeno el fuego no tendría lo que consumir y se desvanecería. Empezó por donde había una manija y fue alargándose hasta cubrir el doble portón, antes de seguir con el restante sintió un imperial poder intentando contrarrestar su hechizo. Bueno mejor seria que solo mantuviera la puerta abierta para que las chicas pudieran pasar y dejara el restante del cercado tal como estaba. 
Al quitar completamente el oxígeno de en torno al portón los demonios Keebets que montaba guardia delante del mismo se desmayaron. ¡Anda mira que fácil! Podría ponerlos todos a dormir con el mismo hechizo. Pero no tenia tiempo que perder quitando el aire a todos esos seres, además de un rescate que cumplir había dejado una conversación de vital importancia en reticencias en su casa. Tenia que volver lo más rápido que pudiera.
Con un silbido llamó la atención de la compañía de rescate con ello también la atención de los demonios que tenia bajo sus pies. Enviándole un pensamiento a Alia le comunicó sus planes.
“— Tenéis que traspasar los portones antes de que se reestablezca.” Alia asintió solamente con un ligero movimiento de cabeza.
— Esa cazadora es lista.— murmuró Vicky con una sonrisa.
Si la hubiera contestado ya sea en voz alta ó mentalmente puede que los Demonios Rojos hubieran captado sus planes.
El cuarteto completamente acostumbrado a los enfrentamientos se reunió en un parpadeo, siguieron por la plaza abriéndose paso a espada, látigo y… ¿Qué era esa niebla fría que las envolvía?

“Teniendo en cuenta el hecho de que aquí abajo hace entre unos 38 y 40 grados centígrados, demasiado calor para su gusto. Algo frío alejaría a los demonios por unos momentos” pensó Kyra. Así que usando sus poderes que solo usaba cuando estaba bastante enfadada creó un aura de frío envuelta de ellas, que en contraste brusco con la alta temperatura dio lugar a una niebla muy eficaz, siniestra, pero al fin y al cabo eficaz.
Roz la miró asombrada y al mismo tiempo acusadora.
—Hombre, no me mires así tan asombrada soy una diosa de guerra sé de estrategia.
—¿Y porque coño no lo has hecho antes?— la acusó Roz.— Podría haberme venido de perlas con ese calor insoportable, pequeña niña de la guerra.
—¿Roz sabes que ella es mas vieja que todas nosotras juntas, verdad?— dijo Dream apuntando hacia Kyragathix.
—¿Qué?¿Empezareis a contar cuantas arrugas tiene cada una ahora?¿Ó seguiréis caminando?— hablo Alia parándose a pocos pasos por delante de ellas dándose la vuelta para mirarlas.

Avanzaron rápidamente hasta el portón encontrándose con una legión de demonios. Al cruzar la reja Vicky percibe que son serpientes de verdad y siguen vivas y reptando aunque por ahora no arden. Interesante muy macabro pero interesante.
—¿Admirando las Boitatás? ¿Son seres interesantes, verdad?— hablo un demonio a su espalda. Mierda! Ya la habían alcanzado.
Dándose la vuelta y cargando contra el demonio Vicky intentó sacar la mayor información posible.
— ¿Me estás diciendo que esas serpientes allí abajo son seres de verdad y no están encantadas para arder?— preguntó escéptica aprovechando el momento de distracción para hacerle un tajo en el brazo. Jodido demonio de mierda era escurridizo.
— Anda mira una hada siendo escéptica. Curioso.— dijo esquivándola con rapidez.— Ya que te interesas te diré que sí son serpientes que se auto inflaman y prácticamente nacen así.
— Extraordinario, gracias por la información.— habló fingiendo simpatía.— ¡Quieres estarte quieto! Joder así no hay quién te mate.
Él la miró horrorizado por la petición.
— Claro que no. Soy el primero al mando de los Yaterés Pirá, que ejemplo estaría dando rindiéndome.— contestó sonriendo.
“¡Bingo!” pensó Vicky lo que necesitaba una distracción. Empuñó las dos dagas con las hojas cortantes mirando hacia abajo, cruzando lo brazos formando una X en la altura de las muñecas, posicionó las cuchillas en cada lado del cuello del demonio. Quién a su vez prácticamente no respiraba temiendo ser decapitado.
—¿Donde tenéis a la cautiva?
—¿Cautiva?¿Qué cautiva?— murmuró.
— La ángel.— dijo Vicky ya impaciente.
—¿Te refieres a la Ipky'yra?
— Dejáte de joder y dime de una vez donde está, y sin palabras raras.— gruñó.
— Te refieres a la princesa.— dijo inspirando con un siseo cuando la hada le presionó las dagas un poco mas fuerte.— Está en el ala oeste ultima habitación al final del pasillo, pero…
— Nada de peros.— le interrumpió.
—… es prácticamente imposible acercarse, hubo una explosión de poder creando una ola de energía que mató todos los demonios en un radio de 30 metros dejando Me Îara y Jaci inconscientes. Nadie es capaz de acercarse porque mantiene una barrera alrededor de la habitación.
— La verdad es que me da completamente igual, vine a aquí a rescatarla y se irá conmigo quiera ella ó no.— dijo Vicky. Sin previo aviso descruzó los brazos decapitando el demonio.
Su cabeza cayó en picado seguida de su cuerpo, que aterrizó cerca de Dream empapándola en sangre olorosa de azufre.
—Tú puñetera madre, Victoria!!!— gritó mirando hacia arriba.
Roz se reía tanto que casi la matan.
Vicky alzó los hombros poniendo cara inocente.— Los accidentes ocurren.
Voló hasta la primera ventana que vio aterrizando en el balcón, entró en una especie de estudio ó despacho, lo cruzó sin más miramientos yendo en dirección al corredor. Corrió por el mismo hacia la derecha hasta llegar en una bifurcación, no podía ver el fin de ninguno de los dos caminos dado que los pasillo eran semicirculares.¡Mierda!
Se concentro en busca de la esencia de Nádia, la encontró. Pero tendría que dar una vuelta enorme, siguió por el pasillo a la derecha por unos 100 metros hasta chocar con una barrera.




Detrás de la barrera…



Era como si me estuvieran partiendo en dos. Y la información entrando a raudales a mi miente. El abrazo de mi padre desencadenó la liberación del otro lado de mi ADN, era como un dejà vu, volvía a tener 18 años y a estar sola en una cueva sufriendo un dolor indescriptible.
Pero eso no era verdad, entonces ¿cuál era la verdad?
Acurrucada en un rincón de la habitación que desagraciadamente había vuelto a ser rosa pude recordar poco o poco lo que había pasado.
Lo último que recordaba era la mirada anhelante de mi padre sujetándome, es algo que jamás olvidaría así como el rostro ensangrentado de mi madre. Hice una promesa ese día y la había vuelto a hacer en el rol de los acontecimientos, no dejaría a su padre solo tanto como me vengaría de la muerte de mi madre.
Nádia no hacia promesas y las que hacia las cumplía. Siempre.
Con mis recién despiertos poderes pude sentir que alguien había irrumpido en su reino… ¿su reino?¿de donde había salido tal pensamiento? Realmente ahora mismo eso ya no tenía importancia.
Otro aguijonazo de dolor. Otra tanda de recuerdos.
Me toque el hombro derecho para comprobar que en efecto allí había un tatuaje y tenia los bordes inflamados como si lo hubieran echo con un hierro al rojo vivo. Le había quemado unos momentos después del toque de su padre justo antes que el dolor me atravesará haciendo que una ola de poder se extendiese por la habitación deshaciendo cualquier cambio se hubiera obrado exclusivamente con el esfuerzo físico. Mi tía y mi padre fueron enviados fuera de la habitación, la misma que se sobrevenía a su color y decoración original.
Me estiré para ver el dibujo de una alas tribales de mi espalda, solo para que el dolor se extendiera mas y eso malditos gritos se acentuaran es como si estuviera en un hall lleno de niños gritones y enfurecidos.
Volví a abrazarme las rodillas ante otra remesa de información, las palabras que en su vez dije que eran “raras” ahora me sonaban completamente lógicas y entendibles.
Su tía la había llamado Sy’oa… corazón su itsasêe .
Su padre la había llamado Ta’yra… hija mía, lo había dicho con tal sentimiento que había olvidado que alguien pudiera demostrar tal afecto desinteresado. ¿Pero realmente era sin intención alguna de retribución ya sea de poder ó favor? Ocho milenios caminado sobre esa redonda bola de agua te daba suficiente experiencia que había pocas casi ninguna acción desinteresada en el universo. La seguía reteniendo contra su voluntad.
También sabia el significado de la cara de horror de su hermano… tykera… hermana mayor. Ahora que sabía casi todo de la cultura de su padre, entendía tales palabras, en la cultura tupí una tykera más que la hermana mayor es un lazo de sangre que exige un respeto y lealtad absoluta por parte del hyker, el hermano pequeño. Tradición que se ejecutaba con más aplomo en la realeza.
Realeza… que asqueroso y prepotente sonaba eso. Tendría un largo camino de insultos y regaños si tenia la intención de no dejar solo a su padre. Esperaba por todos lo medios que los habitantes de este reino no la llamarán Ipky'yra. Princesa.
¡Arrgghh! A Simi le encantaría.
Alguien irrumpió en la estancia sacándome de mis pensamientos. 


macky37

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Re: Nádia Kygiarkos “Άγγελος των μαύρων φτερών“
« Respuesta #19 on: Julio 13, 2009, 08:35:37 pm »
por fin tengo compu nueva y puedo volver al foro,y encima me encuentro con un monton de fic nuevos.Felicito a la autora de este y espero que escriba seguido,hasta aca va barbaro :emot020: :emot020: :emot020:

NádiaEirenye

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Re: Nádia Kygiarkos “Άγγελος των μαύρων φτερών“
« Respuesta #20 on: Julio 14, 2009, 05:57:38 am »
por fin tengo compu nueva y puedo volver al foro,y encima me encuentro con un monton de fic nuevos.Felicito a la autora de este y espero que escriba seguido,hasta aca va barbaro :emot020: :emot020: :emot020:

Muchas gracias  emot024 emot024

NádiaEirenye

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Re: Nádia Kygiarkos “Άγγελος των μαύρων φτερών“
« Respuesta #21 on: Julio 19, 2009, 01:28:05 am »
Bueno os traigo un trocito mas, que lo disfruten  emo76



— Malditos sean todos los jodidos dioses! Pero que mier…
Vicky logró traspasar la barrera pocos minutos después de encontrarla pero no sin que le costase el use de casi toda su fuerza. La barrera la había devuelto tal como era cuando vivía en “mundo de T. Teg”, con su atuendo real dicho sea de paso que había decidido no llevar mas, y volvía a tener el pelo largo y rubio cobrizo. Entro a la habitación que estaba decorada en varios matices de rosa.
— !Mierda santa! Esto es simplemente repugnante.— dijo Vicky con un semblante de absoluto asco. Si tuviera plumas podría decirse que es la habitación de Paris “Pija” Hilton.
Un sonido que no pudo discernir si era una risa ó un gemido doloroso le captó la atención hacia un rincón en el suelo al lado de un tocador. Allí estaba el objetivo de su incursión a ese antro irónicamente llamado infierno, acurrucada abrazándose mutuamente con los brazos y las alas.
Vicky se acercó arrodillándose a unos centímetros de la ángel.
— Mi niña que te hicieron?



Levanté la vista para descubrir que la dueña de la voz que había conseguido burlar mi inconsciente defensa era nada menos que una hada, jamás en mis ocho milenios de vida me había topado con un hada, uno que otro fae sí, pero una auténtica hada con sus titilantes alas no. Miré a aquellos ojos grises con unas pequeñas motas verdes para desvelar que así como lo hacia su voz, su mirada me tranquilizaba como una nana hace con un niño lloroso.
“Como lo hacia la voz de mi madre.” Tal pensamiento causó un dolor que me hizo encoger pero no debido a la brecha de nuevos poderes en mi cuerpo mas bien por una cicatriz sin curarse del todo en el corazón.
Solté un gemido lastimero.
— Shh, ya esta… — dijo el hada abrazándome.
Era increible que un ser con el pasado de esa hada fuera capaz de demostrar compasión y cariño hacia los demás. Admirable ese era el epíteto adecuado para ella.
— Venga salgamos de aquí. Esa habitación es horrenda ¿ de quien será?
— Se supone que es mía — murmuré.
Se alejó para mirarme a los ojos.
— ¿ En serio te gusta tanto el rosa? — dijo la palabra “rosa” como si se tratara de un gusano baboso.
— No, lo odio con toda mi alma. Creo que fue lo mas torturante de que me trajeran aquí.
Vicky soltó un carcajada.
— Bueno creo que ya tenemos algo en común, mi niña.
— ¿ Por que me llamas así?— pregunté.
— La verdad es que no lo sé — dijo intrigada.— Cuando te miro es lo primero que se me ocurré.
— Sabes que soy casi 7 siglos mayor que tú ,verdad?— pregunté sonriente.
— Pues no lo sabia, además si se me antoja llamarte asi lo haré — dijo haciendo casi un imperceptible puchero.
Sonreí mas ampliamente.
— Ahora arriba, que te sacaremos de aquí — dijo ayudandome a ponerme de pie.
— Gracias Victoria.
— Pero como…?
— Soy omninescente. Mas con alguién que tan cerca de la muerte estuvo. Me lo dice tu alma.
Caminamos hasta llegar al despacho de Xandy, cuya ventana por la cual había entrado Vicky. Salimos a la terraza donde se podia admirar un lucha injusta pero asombrosa.
Cuatro mujeres luchaban contra una la horda de demonios.
Conocia y sentia cada uno de ellos, ellas en especial. Y valoraba cada una de ellas mas que a mi misma.
Pero ya era hora de irse.
— Niñas nos largamos — gritó Vicky. En un tono mas bajo me dijo. — Un detalle… mmm…¿ Sabes como saldremos de aquí? Hemos entrado por un portal que seguramente estará cerrado.
— No te preocupes yo abriré uno.
Me miró con un alzando una ceja.
— Soy la puñetera princesa algún control sobre esta mierda tendré que tener, no?
La hada se rió ante mi respuesta.
Trajé a las demas hasta nosotras levitandolas.
— La concha…— empezó a decir Roz.
— Nádia, como me dejes caer te perseguire y te patearé el culo.— dijo Alia.
— Hmmff — bufé. — Deberia dejar que te estamparas por haber aceptado un juramento inquebrantable tomandome por sospresa.
— Pues como me dejes caer a mi harás muuuchas cosas que no quieres.— amenazó Dream. Siendo el mismisimo libre albedrio Dreamara podia fácilmente cumplir esa amenaza.
— Dreamara con que te han coaccionado para que vinieras hasta aquí?
La pacifica atlante no era muy de armas tomar aunque no se debe subestimarla por eso. Podria ser tal letal como cualquiera de las presentes.
— Pues por lo visto tuve un momento de necedad espontanea. Anda que venirme al infierno con una tanda de locas.
— Gracias por la parte que me toca.— gruñó Kyra.
— Venga Ky que tampoco es como si fueras la mas lúcida y responsable del grupo.
— La frase cierta seria : Tampoco es como si hubiera alguien cuerdo en ese grupo.— dije aterrizandolas en la misma terraza a unos metros de donde estabamos Vicky y yo.
Dream acorto la distancia y me abrazó.
— ¿Como se te ocurre dejarte secuestrar? — dijo dandome una guantazo en brazo.
— Aw! No fue culpa mia, el cerebro de percebe me distrajo. — dije en mi defensa.
— ¿Quien se supone que es “ el cerebro de percebe”? — preguntó Vicky.
— ¡¡Savitar!!— dijeron las cuatro al unisono entre risas.
— ¿Es que siempre tienes un apodo nuevo para él?— preguntó Kyra.
— Ves es por eso que todavía la soporto — habló Alia.
— Pobre Jefe — murmuró Roz negando con la cabeza.
El gruñido que soltó Alia hizo que la cazadora de alejara unos pasos.
— Una pregunta…¿habéis notado que lo demonios no nos atacan? — resaltó Kyra.
— Saben que no deben hacerlo.— atajé.
— Y como…— siguió la diosa atlante.
— Venga, que quiero salir de aquí.— dije evadiendome.
— ¿ Y como se supone que lo haremos? El portal esta cerrado.— habló Roz.
— Así.— dije.


Al minuto estabamos en Katoteros.
— Tendrás que explicar el porque puedes hacer eso.— dijo Dream desconfiada.
— Si D-I-O-S-A de las almas y la venganza cuentanos eso.— parloteó Roz dando enfases a la palabra Diosa.
Le lancé un mirada asesina.
— ¿O quizás deberia llamarte “ Su alteza” ó “Princesa”?— siguió.
— Como siguas balbuceando no me llamarás de ninguna manera porque te arrancaré la lengua.—  hablé entrecerrando lo ojos.
De repente un grito se extendió por la habitación.
— NEEEEEEEEEEGAAAA—. Simi se lanzó hacia mi abrazandome haciendo que dos cayeramos al suelo.

macky37

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Re: Nádia Kygiarkos “Άγγελος των μαύρων φτερών“
« Respuesta #22 on: Julio 22, 2009, 11:56:34 am »
 :emot015: :emot015: :emot020:

NádiaEirenye

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Re: Nádia Kygiarkos “Άγγελος των μαύρων φτερών“
« Respuesta #23 on: Agosto 18, 2009, 10:58:26 pm »
Ya desde ahora me disculpo por la tardanza prometo que intentaré colgar trocitos mas a menudo  emot025 bueno ese es el deselace del capitulo.
Espero que eso guste  emot040 ya os digo que mas tarde en la noche pondré la primera parte del Cap. 5




Se acercarón todos a ver que tal había ido el rescate. Con Simi jurando que estaria cerca de mi todo el tiempo, que duró los cinco minutos antes de empezar el Diamonique en QVC.
— Me alegro de que estes bien — dijo Calista abrazandome.
Yo me aleje de su abrazo para poder mirarla.
— ¿Estás bien no te hicieron nada, verdad?— pregunte ansiosa.
— Nooo! Estoy bien — dijo poniendo los ojos en blanco.
— Bueno ya que no se requiere mas mi presencia, me voy. Sigo teniendo un asunto pendiente en casa.— habló la hada.
— Ahh si ese alto y vikingo asunto — dijo Gise.
Fulminandola con la mirada Vicky se despidió con un abrazo y se fue.
 — Bueno mi gente me voy de vacaciones que las necesito. Cualquier cosa a mi movil por favor nada de llamadas mentales, apariciones repentinas y todo eso.
Diciendo eso sin esperar respuesta le di a una abrazo y un gracias a todos y destelle en mi casa a las afueras de Santorini.


Dioses que día infernal literalmente, mi piel parecia haber sido lavada con ácido por lo que estaba super sensible. Me paré en la terraza de cara al mar, la brisa marina fue realmente un alivio.
Adoraba esa casa la había comprado hace mas de 300 años, la casa colonial griega de dos plantas estaba pintada de blanco y azul. La había restaurado hace muy poco, cambiando el sistema de calefacción y aire acondicionado, sustituyendo las ventanas coloniales por ventanales de vidrio para un mejor aceso si daba el caso de entrar volando con urgencia. Pero lo mayores cambios fueron en la cocina y los balcones. La misma terraza en la que estaba parada ahora la había alargado mas hacia el acantilado que desde la barrandilla se podia mirar las olas rompiendose mas abajo.
Me di la vuelta y desactivando las alarmas entre por las enormes puertas de vidrio que daba hacia la cocina amueblaba con electrodomesticos de aceroinoxidable y mármol negro. Subi las escaleras disfrutando de la sensación de humanidad de esa acto tan simple, “expresso ducha de media hora” asi se llamaba mi tren.
Me quité la ropa oliente y empapada en sangre. Abri el grifo de la misma y me meti inmediatamente bajo el chorro de agua fria, ufff eso se sentia realmente bien.
Dejando que las cascada de agua relajara mis cansados musculos cavilé en lo que había pasado en las ultimas siete horas. !Santa mierda! Que giro había dado mi vida… había encontrado a mi padre…el de verdad no una invencion creada para calmar una niña. Dioses como echaba de menos a mi madre, después de tantos milenios todavía la añoraba como el primer día. Me apoyé en la mampara de la ducha dejando que el agua quitara mi soledad aunque era conciente que de realmente no iba a tener tal efecto.
¿Qué iba a hacer ahora? Seguramente mi padre me estará buscando, y una horda de demonios con él. Pero se veia tan añelante tan solo. ¿Seria demasiado injusto echar abajo todo el esfuerzo de mi madre por ocultarme?
No entendia porque lo había echo, si solo hubiesse sido por temor, Jaci no lo hubiera confirmado.Estaba tan harta de esa vida, era verdaderamente jodido no poder morrir cuando te sientes tan cansado y ya estas seguro que no podrás dar un paso mas.
Recosté la frente en el cristal y lloré. Por años de lucha sin sentido, por ese camino que parecia no tener fin, por las mentiras, los engaños… por mi madre… 8 mil años de lagrimas contenidas fueron derramadas con solo el agua y la soledad por testigo.

NádiaEirenye

  • Visitante
Parece que tarde mucho en poner otro parte  :emot003: se me fueron las lectoras :emot017:




Capítulo 5


Cuando salí de ducha tenia los dedos de los pies arrugados y la piel de un tono mas claro de tanto quedar bajo el agua. Me seque y caminé desnuda de vuelta a la habitación cuando capté mi reflejo en el espejo, en mi espalda había un tatuage tribal con lo que parecia ser un simbolo de unos 13 centimetros de diametro. Entonces fue eso lo que ardio como si la hubieran echo con un hierro candente. Genial simplemente genial, ahora a esperar a ver si desaparece como hicieron los demas. Desde siempre me encanto los tatuajes pero al cabo de uno o dos meses se iba completamente, desaparecian como si nunca hubieran estado alli.
Soltando un gruñido caminé hasta el armario y me puse un vestido ibicenco negro con detalles blanco y sandalias. Destellé cerca de la ciudad y me adentré en sus calles en dirección al paseo maritimo, adoraba esa ciudad en diferencia de los dioses, la gente griega era en su mayoria amable y cordial. Fue estraño ver como esa ciudad crecia de la nada, su casas blancas cerca del mar y la gente bulliciosa en el puerto de Perissa. Mi casa estaba situada en los acantilados de Akrotiri bastante alejada de la civilización de Perissa o Thira.
Me paré a comprarme un helado italiano en grecia, cosa que jamás seria posible si estuvieramos a 2000 años atrás. Paseaba por sintiendo el sol en mi piel tamando mi delicioso helado de mango caundo sentí una presencia… un Blanco.
Así llamaba los de mi especie que todavía estaba atados. Eran peones al uso de Dioses que no les importaba mas lo mínimo los demás, porque estaban demasiado tiempo pensando en si mismos.
Solté un sonoro insulto desapropiado para una señorita, varios caminantes me miraron.
— Como si no hubieron dicho un taco en sus vidas.— gruñí.
Tenia que cazar al Blanco, hacia meses que no veía uno, así que no podía dejar escapar esa oportunidad. Pero se suponía que estaba de vacaciones.
— Odio hacer eso.— refunfuñe y recordé lo que me dijo en su día Acherón.
“Solo lo puedes hacer tú, es tu destino.”
Mire el helado y cerré lo ojos con fustración.
— Jodido trabajo que solo lo puedes hacer tú.— protesté para mi misma tirando mitad de mi maravilloso helado a la basura.
Estaba tan absorta quejándome que casi levanto vuelo en mitad del paseo marítimo atestado de gente. Caminé hasta encontrar un callejón, ya en él me trasladé a mi casa.
Me cambié de ropa, cogí mi espada, el látigo y unas grilletes atlantes.
— Pues menudas vacaciones te has pillado — murmuré.
Acababa de salir de un secuestro con los poderes todos desorbitados porque a mi “papi” se le dio que tengo que ser reina. Ya le diré por donde se puede meter la maldita corona. Ademas que mi espalda duele un huevo.
Ya en mitad de la ciudad aterricé en la azotea de un edificio, respiré hondo y me concentré en buscar el Blanco, le localicé a una calle del centro comercial de la ciudad. Aparecí a dos metros él ó mejor digo ella, me fundí en las sombras para que no me viera.
Debería ser alguna comandante ó general por lo relucientes brazaletes blancos, y también debería ser rebelde por los tres lazos que la ataban y que no podía ver.
Seguía un hombre alto y de piel morena, seguramente era latino posiblemente del caribe. Les seguí de cerca pues ya sabia lo ella que iba hacer.

Mi madre nació en el Reino Ahptè, es un lugar donde se controla todos los destinos incluyendo los de los dioses. Se supone que deben ser neutrales y objetivos, dada esa circunstancia le fueron arrebatados lo sentimientos. Lo único que yo sabia era que los Blancos estaban cazando gente que harían algo realmente importante en futuro, porque los cazaban aunque fueran hacer algo bueno para el mundo escapaba a mi comprensión.
Los que tenia en mi poder, que lograban acordarse de algo se negaban a hablarme ó contarme algo. Y también sabia lo de la atadura, jamás serian libres, si dejaban al “jefe” serian atados a quien los liberó, era una cadena sin fin.
Salí de la sombras y salté delante de ellos bloqueándoles el paso, el chico me miro con completo asombro y miedo. Encontré su mirada color miel y divisé su futuro… pero no tenia fin. Ese guapo moreno jamás moriría, era un futuro Chthonian como la mayoría de los que había  salvado los últimos milenios.
Tenia que haber alguien detrás de caza de los chthonians eso me olía a chamusquina, porque un Reino neutral cazaría el equilibrio del mundo si no fuera a favor de los dioses?
Con una simple manipulación mental incité al joven a un profundo sueño y le sujeté evitando que cayera al suelo enviándole a Katoteros, Alexion ya sabría lo que hacer.
Encaré la Blanca, era la primera ángel con la que me encontraba, era increíblemente bella, con ojos de color de aguamarina, el pelo castaño y corto a la altura de los hombros, si esa si era una rebelde.
En unas de las pocas historias que me contó mi madre de niña decía que las de su raza tenían prohibido cortarse al pelo y que por eso ella lo llevaba tan corto y también me cortaba el mío.
“— Simboliza nuestra libertad, hija.— me decía.”
Y yo protestaba ya que me gustaba llevarlo largo pero mi madre jamás me dejo hacerlo, lo use corto hasta el día que murió. Mi largo pelo es el recordatorio de quienes la mataron. Agité la cabeza para espantar lo malos recuerdos y le mire a aquellos ojos fríos como un mar helado.
— Quién crees que eres para arrebatar así mi presa? — me dijo en un tono frió que ya era de esperarse.
— Pues en primer lugar no creo, estoy segura, y en segundo soy tu libertad ó tu eterna condena depende por donde mires.— desplegué las alas dado que para liberarlos tenia que hacerlo.
Abrió la boca asombrada, interesante pensé, eso era un rastro de emoción.
— El Ángel Negro.— farfulló.
— Oh, venga ya! Odio que me llamen así, me siento como se fuera un trozo de carbón.— protesté haciendo una mueca.— Dejémonos de cháchara que no hace ni dos horas que he salido de un secuestro, tuve que renunciar a un helado para estar aquí asi que estoy de un humor de perros.
Convoqué dos dagas una en cada mano y me preparé para luchar. Dimos vueltas analizándonos mutuamente hasta que ataqué. Logré cortarle el lazo que llevaba en la muñeca, en un descuido me hizo un tajo en el brazo que escocía como el demonio.
— La madre que te parió, te juro que se degollada escuece menos.— refunfuñe.
— Soy un general niña, a mi no me ganaras tan fácilmente.
— Por fin alguien que opone resistencia, y le da un poco de vidilla a eso.— dije mirando al cielo.
Sacó una espada de titanio y la balanceó como lo haría solo una persona que esta acostumbrada a levarla, la manejaba como si fuera una parte suya como lo es un brazo ó un pie. Conjuré una katana normal, no de oro, jamás mataría uno de la raza de mi madre por seguir ordenes de dioses egocéntricos.
El sonido del metal resonaba en el ya oscuro callejón, realmente fue bien entrenada, a cada estocada mi katana se encontraba con su brillante espada. Harta de luchar y muriendo de ganas de volver a casa, me cambié mi espada por un puñal y me aparecí detrás de ella y la inmovilicé por el cuello.
— Ahora te cortaré eso.— dije poniendo el puñal en su cuello.
— Al menos tendrás la honradez de decirme el nombre de mi muerte?— dijo con la cabeza alzada con dignidad.
Le corté el segundo lazo de oro brillante.
— Solo si me dices el tuyo.— dije juguetona. — Además no planeo matarte.
“Pero es que te has vuelto completamente loca ??” me grito mi subconsciente, le daba una enorme ventaja permitiéndole saber esa información. Por increíble que parezca esa mujer me transmitía una enorme sensación de confianza.
— General Amelia Stathopoulos,  del primer batallón del Reino Ahptè.
Me tambalee hacia atrás aflojando el agarre que tenia en su cuello.
¡¡No podía ser!! E…era imposible!! No podía llamarse como mi madre! Jamás en ocho mil años había encontrado alguien con su nombre. Aprovechando mi despiste logró huir de y alejarse unos cuantos metros. Me aparecí delante de ella completamente enfurecida, primero odiaba correr tras una presa y segundo acababa de decirme que se llamaba como mi madre.
— Amelia?? Trabajadora y perseverante. Un nombre fuerte, digno de un general.— hablé transmitiendo una tranquilidad que no sentía.
No tenia ni idea de cómo se veían mis ojos pero aquella mujer parecía estar mirando al mismísimo infierno.
“Carita y alas de ángel pero una mirada que te promete el infierno si te atreves a desafiarla.” las palabras de Savitar resonaban en mi cabeza.
— Si, intento ser digna de mi nombre. Me lo dieron por la desaparecida Princesa de Ahptè.— dijo con orgullo.

Continuará …







NádiaEirenye

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— No, no, NO. Nada de reinos, ni de coronas, ni de princesas, pero que mierda es eso un puto cuento de Disney?
Aprovechando mi ataque de negación, me dió la espalda y levantó vuelo. Gruñí muy alto. Ahora si me habia cabreado.
— Adonde crees que vas — dije cogiendolo del tobillo aprovechando para cortar en lazo que tenia alli, como se movia mucho fue inevitable el corte en su piel, ahora quedaba el de la muñeca.
Bajandola de un tirón y siendo un poco brusca le corté el ultimo lazo, con un grito de dolor se desmayó.
¿¡¿Que mierda fue eso?!?
Vale que era la primera que liberaba despues de descubir mi "otro lado", aun asi ninguno de los anteriores la liberación les habia causado dolor.La cogi en brazos y destellé en mi casa.
Una hora despues se despertó un poco desorientada.
— Donde estoy? Quién ere... Ya recuerdo. Por que lo has echo?
— Ochi, que aqui la única que hace preguntas soy yo —. Hablé desde mi posición de pie con los brazos en jarras apoyada en la pared al lado de la puerta.
Su mirada se dirigió hacia la ventana.
— Ni siquiera lo pienses — dije entrecerrando los ojos.
— No creas que te tengo miedo, solo porque eres un cuento para niños no me dejaré avasallar ni por ti ni por nadie.— dijo sentandose en la cama.
— Por que dijiste que mi madre es la princesa de Apthè?
— Es obvio, si lo he dicho va ser que lo es. Además no hay constancia de Amelia haya tenido nunca una hija.
— Bueno me importa un rabano si lo saben alla o no, naci libre y seguiré asi hasta el dia que por fin encuentre la forma de morir.
— No puedes morrir?
— Ya te he dicho que no preguntes. Cuentame todo lo que sabes sobre mi madre.
— Y que consiguiré con eso, que remates el trabajo que no terminaste en el callejón.
— Creeme angel si quisiera matarte ya lo hubiera echo. Cuentamelo y te haré un propuesta mejor que la que consiguieron lo otros.Y no volveras nunca a estas bajo loa caprichos de prepotente de tu jefe.
— Otros...que otros?
Gruñi en respuesta.
— Vaaale, pero jurelo por su madre que no hará que vuelva a recibir ordenes de aquel gilipollas.
— Bueno no creo que las escucharás dado como te tenia controlada, pero lo juro.
— Bien te cuento.


"Se dice que Amelia la hija de Panos, el rey. No estaba de acuerdo con el manejo de su padre hacia las personas cuyo destino esta en nuestra manos la responsabilidad de hacer que se cumpla. El dia que se rebeló la expuso desnuda en una caja de vidrio en mitad de la ciudad, pero lo peor no fue la humillación de eso si no que lo hizo despues de haberle dado una paliza que la dejo casi muerta. Ella aguantó durante tres semanas hasta que desparecio de la caja. Todos le dieron por muerta pero 4 meses despues volvió y se presentó en el cuampleaños de la muerte de su madre en medio del acto honorífico se arrancó un pluma por cada año de muerte — mueca de dolor — y las depositó sobre la lápida de su madre. Se cuenta que iba vestida como un hombre y llevada el pelo corto tambien como el de un hombre, se paró delante de su padre escupió en el suelo a sus pies y le tiró el collar que la señalaba como perteneciente a la famila real en la cara, la fuerza del impacto le dejó un corte en mejilla del rey. Salió volando aun cuando las alas les sangraba por las plumas arrancadas, despues de eso nadie nunca la volvió a ver."



¡¡Oh Dios!! Mi alma estaba gritando lo que no eran capaces de hacer mis cuerdas vocales. Alli de pie en la misma posicion la lagrimas trazaban su camino en mi rostro. La tocaya de mi madre alzó el rostro que reflejó la sopresa por mi llanto.
— De verdad que es tu madre ¿no?
Solo fui capaz de asentir, ya ahora tenia la confirmación de ellos la habian matado.
— Quiénes la matarón fuiste vosotros.
— Ellos lo hicieron ellos, a mi no me metas en mismo saco.
— Es igual lo que importa que es me quitarón a mi madre cuando tenia 9 años por si no fuera suficiente lo hicieron delante de mi.
Mas lagrimas.
— Lo siento de verdad. Pero eso no tiene nada...—. Se quedó muda de repente.
— No intentes salir solo te harás daño,mañana hablaremos.
Diciendo eso destellé en alguna montaña en mitad de ninguna parte. El viento azotaba mi pelo y congelaba mis lagrimas.
Dioses habia llorado mas en los ultimos dos dias que en los pasados 8 milenios me sente sobre mis talones en la hierba escarchada, y me entregue al dolor que sentia.La ultima vez que habia llorado desconsoladamente fue cuando salieron mis primeros poderes premonitorios.

"Correteaba por Chrysafi, vale que era un poco grande para hacerlo pero se divertia mucho con Simi y le gustaba que la persiguiera por todos los lados. Dream que en aquella epoca vivia alli siempre no regañaba por eso.Choqué con Ash por unos de los pasillos, como no estaba atenta a mis poderes el toque hizo que mi miente retocediera hasta su pasado, me quedé en trance unos 30 minutos reviendo todo aquel dolor y aquella degradación, al volver a enfocar los ojos vi el rostro peocupado del atlante y su cara triste y su pelo rubio se sobrepuso a la vision real de él unos instantes. Me eché a llorar tan fuerte que me convulcionaba y un ser que tenia todos lo motivos para mandar a la mierda todo y todos me abrazo diciendo que dejara ir el dolor porque no era mio. Dioses con ese acto lloré el resto del dia por él por mi, por su madre por la mia.
La admiración que tenia por el atlante ese dia se hizo en completa devoción y respeto."

marodi80

  • Visitante
Gracias por continuarla Nadia  :emot008:  emot024  :emot008:

NádiaEirenye

  • Visitante
Un placer  emot024

Nacha

  • Visitante
muy bueno, gracias por todo!!   mucho animo esta quedando muy buena

NádiaEirenye

  • Visitante
Gracias a vosotras  :emot008:

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