bueno ahi va la mia
Sus labios dibujaron la sonrisa de un cazador, de un depredador. La luz del
fuego se reflejó por un instante en sus ojos que brillaron como los de un
lobo en la oscuridad. No dijo nada. La contemplaba fijamente, sin parpadear.
*** se llevó la mano a la garganta de forma protectora.
- Es tarde; debería marcharme - podía oír el latido de su corazón. ¿Qué
quería de él? No lo sabía, sólo podía pensar que estaba disfrutando de la
noche más perfecta y aterradora de toda su vida y que quería verlo de
nuevo. *** estaba totalmente inmóvil, amenazante. *** esperó sin
aliento. El miedo la asfixiaba, la hacía temblar. Miedo a que él la dejara
marchar; miedo a que la obligara a quedarse. Inspiró profundamente
-***, no sé qué es lo que quieres de mí - Tampoco ella sabía lo que quería.