Capitulo 6
Thorment se materializó en piso vacío de la amiga de Qhuinn, no estaba muy seguro de por que estaba ahí, realmente no deseaba involucrarse, ya tenía suficientes problemas como para añadirle uno más y por la forma en la que operaban la sociedad Lesser, seguramente para esas horas la chica ya hubiera sido torturada hasta la muerte.
La muerte de civiles no era algo extraño, pero aun así cada vida que terminaba era una perdida tremenda para la raza.
En ese momento tomó la decisión de saber que era lo que le había sucedido aunque fuera únicamente por el bien de Qhuinn.
No existía una razón validad para que estuviera ahí, no existía nada en su casa que le dijera a donde se la habían llevado los lessers, pero no podía sacarse de encima la sensación de que tenía que ver sus cosas, tocarlas como si encontrara alguna clase de respuesta en esos muebles viejos y un tanto estropeados pero muy limpios, en aquellos detalles femeninos o en los libros regados por todas partes.
Caminó por su minúscula salita sintiéndose un intruso entre los pequeños detalles: una vieja manta rosa hecha de pequeños retales, dejada sobre el sofá como si la dueña estuviera apunto de alcanzarla, seguramente su dueña la usaba cada vez que se tumbaba a leer en el sofá. Sin pensarlo Thor la tomó para llevársela a la cara y aspirar. Olía a flores, brisa marina y hierbas verdes, el olor se penetró en Thor por la nariz y se extendió por todo su cuerpo calentándolo, su sangre rugió en sus venas. Tuvo una breve visión de ella desnuda sonriéndole, sus cabellos extendidos como un halo rojo sobre una almohada blanca, no fue su intención pero tuvo una erección instantánea y se sintió como la peor clase de pervertido al desear a una mujer que quizás había sido asesinada en medio de atroces dolores.
Sacudiendo la cabeza para despejarla Thor levantó la mirada hacia una pared cubierta con fotografías de todos tamaños. Las caras sonrientes de muchos desconocidos decoraban un blanco muros, entre ellos el rostro infantil de Qhuinn abrazando a una hermosa chica que sonreía a la cámara como si fuera feliz.
-bella- la palabra se escapó de sus labios.
En otra esquina estaba un pequeño marco de madera con una foto en blanco y negro de la misma chica, sentada abrazando las rodillas, sus ojos tenían una mirada un tanto triste, como si la hubieran sorprendido con la guardia baja. Thor la tomó y deslizó un dedo sobre la foto como si pudiera llegar a ella através de ese pequeño gesto, el corazón le dolió a al pensar en lo que debía haber sufrido a manos de los lessers.
-que tu agonía haya sido breve- murmuró en la antigua lengua a modo de oración.
Fue conciente del peso del bolso en sus manos, la más personal de las posesiones de una mujer, sin dudar lo colocó sobre la mesa para poder verlo.
Al abrirlo el olor de flores se hizo más fuerte, con una sonrisa triste Thor fue sacando con cuidado el resume de la vida de Morgan en pequeños objetos, un tubo de crema para las manos, un par de pequeñas pulseras de cristal tan delicadas como lo eran las muñecas que las lucían, llaves del apartamento, su cartera con algunos billetes y tarjetas, su carnet de conducir.
El móvil no estaba ahí. Quizás… Thor tuvo una idea, la remota posibilidad que ella hubiera conservado el teléfono de alguna manera. No perdía nada con intentarlo. Tomando su propio aparato le marco a V, si alguien sabía como localizar el móvil de Morgan sería él.
-Hermano- Thor no se molesto en los saludos iniciales –necesito saber si puedes encontrar un móvil
-depende, ¿tienes el número?
-no, solo el nombre de la persona, Morgan Liris.
-no va a ser fácil, veré que puedo hacer.
-has tu mejor intento hermano, por cierto que sabes del chico.
Hubo una pausa en el teléfono como si V estuviera dando una chupada a su tabaco turco, un segundo más tarde respondió. –la cosa no pinta bien, llegó con una laceración en el baso pero lo peor que Havenrs dice que esta cerca de su transición.
-mierda, el chico tiene agallas, estaba aguantando bien contra un lesser y aun es apenas un pretrans.
-esperemos, te llamó en cuanto tenga algo.
Al colgar, Thor recorrió con la mirada nuevamente el lugar, por alguna razón se sintió extrañamente reconfortado. Un leve cosquilleo en su piel le dijo que el sol estaba a punto de salir, lo mejor sería marcharse, al hacerlo se llevó la vieja manta con él.
Para cuando se materializó en sus habitaciones en la mansión, la aurora estaba peligrosamente cerca. Thor se desvistió dejando caer su ropa a su paso, se quitó las fundas de las dagas y la lanzó a un sillón si preocuparse si caía o no ahí, apenas había colocado la mano en la cremallera cuando su móvil comenzó a vibrar, el número de V, sin perder el tiempo lanzó un –¿que averiguaste hermano?
-yo también te extrañe- respondió irónico V-con calma Thor, tengo varias noticias, lo primero, tenemos una situación en la mansión del Leahdyre.
Thor no estaba para aguantar las estupideces de la Glymera -¿Qué fue en esta ocasión? ¿Una uña rota?.
-esta vez es serio, hubo una explosión y a estas hora el Leahdyre se encuentra en el Fade.
-¡Cristo! ¿Lo sabe Wrath?
-Darius debe informarle, pero hay más, encontré el número de la amiga de Qhuinn, hice la llamada, sonaba ocupado hasta hace media hora.
De inmediato Thor comenzó a recoger sus ropa, colocando el móvil con el hombro –dame la dirección.
-con calma hermano- V hizo una pausa, posiblemente para exhalar la mierda que fumaba –el sol esta por salir, el GPS me muestra un área de granjas, con mucha facilidad podríamos encontrar una fuerte resistencia.
-mierda V ella podría aun estar con vida.
V permaneció callado un largo rato, cuando respondió lo hizo con mucha suavidad, algo extraño en él –es improbable, la sociedad Lesser nunca mantiene a un prisionero por más de unas horas.
Thor se pasó una mano por sus oscuros cabellos cortados al estilo militar. –no se si podré tener paciencia.
-descansa hermano, en la noche tendremos mucho que hacer.
-no creo que pueda pegar los ojos.
-inténtalo hermano es mejor así.
En la habitación de la bóveda, Wrarth se preparaba para descansar, desnudo de la cintura para arriba, estaba por sacarse los cueros cuando un par de discretos golpes en la puerta lo detuvo, tomando sus lentes envolventes giró de cara a la puerta.
-pasa- ladró.
-mi señor- lo saludó Darius nada más entrar.
-deja de joderme con el titulo, me da dolor de cabeza- dijo con aspereza Wrath, cruzando sus enormes antebrazos tatuados sobre el pecho -¿Qué nuevo desastre tenemos entre manos?
–hubo una explosión en el hogar del Leahdyre.
-joder- gruñó de nuevo, -¿provocada o accidental?
-no lo se con exactitud pero por la forma en que quedo todo, me temo que bien podría ser obra de los Lessers.
-nos conviene saber que esta ocurriendo, llévate a V y a Phury e investiga, no necesito decirte que uses la diplomacia D.
Darius se inclinó levemente antes de responder como dictaba el protocolo-como desee mi señor – y obteniendo un violento rugido del rey.