Bien, avanzamos rápido porque el tiempo es oro chicas. Estoy llena de energías asi que aqui les va mi siguiente regalo parte por parte:
Continuación cap 26
Ella sonrió
-¿Qué es lo increíble?
Él sonrió igualmente.
-Nosotros los carpatianos no celebramos las costumbres humanas. Hace un año fue la primera navidad que he celebrado nunca y es increíble que yo, de entre muchos de nosotros, haya recibido el regalo que estuve esperando por tanto tiempo_abrazó más fuerte a su compañera_Las coincidencias de las festividades.
-No, no creo que haya sido una coincidencia_dobló su cabeza para mirárle_Debes haberte portado bien para haber recibido regalo_se rió de su propio comentario.
Dimitri le besó en la nuca.
-Lo dudo. Yo no soy precisamente la definición de rectitud. He cometido demasiados pecados a lo largo de mi vida. Tantos pecados…temí por ti en muchas ocasiones. El tener que estar atada a un monstruo como yo para siempre… no creo que haya sido tu definición de regalo perfecto para la navidad, ¿no es así?_ella bajó la cabeza, avergonzada_Pero independiente de eso me doy cuenta además de que he sido bastante paciente. Me refiero a que…_su boca se acercó a su oído y le susurró_Tu fuiste el primer regalo de navidad que he recibido nunca y esperé todo un año para abrirte_entonces le besó la mejilla cálida por el rubor.
Skyler negó con la cabeza, tratando de recuperar el aliento que de pronto pareció haberse esfumado.
No deberías hacer esa clase de comentarios mientras Tiberius esta cerca. Podríamos traumarlo otra vez.
Dimitri sonrió con melancolía y le hecho un vistazo a Tiberius. Estaba concentrado en el acertijo sin prestar atención a nada más. Su mente parecía la de un matemático o un científico, solo teorías y opciones para resolver la encrucijada. No había emociones, no había sentimientos, solo una razón implacable y fría.
Su corazón pareció de pronto tan pesado como una piedra de solo recordar que él había estado así, igual que su amigo. Frío y sin sentimientos, solo razón y lógica en su mente, nada por lo que luchar, nada por lo que vivir además de servir a su gente. Su mirada entonces se enfocó en Skyler. Ella le había de vuelto a la vida, pero a costa de un gran sacrificio.
-¿Alguna vez podemos ir al Mediterráneo, Dimitri?
Su dulce voz, trajo de vuelta a Dimitri de su estado de meditación.
-¿Qué hay de interesante ahí?_preguntó mirando la parte del mapa en dónde ella apuntaba. Él solo veía una gran extensión de agua justo debajo de Italia, Turquía y Bulgaria. Parecida a un inmenso lago.
-Bastantes cosas. Ése lugar esta compuesto de varias islas, demasiadas en realidad y cada una tiene su historia. Es porque está cerca de Grecia y los griegos decidieron nombrar a cada isla de acuerdo a un personaje de sus leyendas. Cuándo vivía con Gabriel y Francesca, siempre me andaban pidiendo que buscara lugares interesantes del mundo los cuales visitar por Internet. Me topé con las islas del Mediterráneo un día y sencillamente me enamoré _ sonrió ante su propio comentario_Son grandes, con muchas zonas naturales como campos de flores y llenas de secretos antiguos. El sol es muy fuerte durante el día, pero de noche es templado y el cielo se ve sencillamente increíble. Además está el mar cerca....
-No digas más. Iremos cuándo acabemos con todo esto. Y posiblemente_su mano acarició el vientre de ella _ no iremos solos.
Skyler colocó su pequeña mano sobre la más grande de él. ¿Sientes eso, cariño? Él es tu padre. Es un hombre maravilloso que te ama y al igual que yo, no resiste las ganas de que estés aquí con nosotros pronto. Crece fuerte y tranquilo, todo estará bien, nunca dejaré que algo te pase.
Un hijo. Ella cargaba a un hijo en su vientre. Simplemente habían veces en que no era capaz de creerlo. Todo era tan perfecto ahora que asustaba. Temía que todo eso no fuera más que un hermoso sueño del cual algún día tendría que despertar y que cuándo lo hiciera, regresaría a las sucias manos de su padrastro.
Entrelazó sus dedos con los de su compañero para anclarse de su fuerza. No iba a dejar que un tonto pensamiento le impidiera ser feliz. Tenía que recordar que aquel monstruo estaba muerto junto con los otros y que nunca iban a colocarle las manos encima otra vez.
-Que hermoso se te ve el pendiente de mi madre, Skyler. Gracias por cuidarlo_le besó en la mejilla y acarició con sus dedos el corazón de plata entre los pechos de su compañera.
Skyler no dijo nada. Desde que descubrió la inscripción tras el medallón, no había sido capaz de comentarle nada a Dimitri al respecto. Él nunca le habría ocultado que tenía una hermana si ya había descubierto todo acerca de sus padres. No la mencionaba ni siquiera en su diario, lo cual era doblemente extraño. La inscripción en objeto de plata decía “mi segundo milagro”. Eso significaba que Dimitri había sido el primero y que la tal Rosemary había sido la segunda. La hermana menor de Dimitri.
Todo aquel asunto, incluyendo el de los vampiros, había provocado en ella tal tensión, que no había momento en el día en que no hiciera el amor con Dimitri. Él estaba impresionado de que ella lo hubiese atacado tantas veces, mostrándose tan desesperada por tenerle, pero nunca se quejaba al respecto, de hecho estaba más que complacido, sin embargo, ella sabía que lo hacía como un medio para olvidar todo el asunto y distraerse lo más posible. Temía que Dimitri se diera cuenta de que estaba tan tensa y se le ocurriera preguntar al respecto. Si Dimitri tuvo una hermana que no menciona en su diario era porque algo andaba muy mal. Habían transcurrido dos días desde entonces.
Skyler, ven conmigo. Necesito que hablemos en privado.
Skyler gimió en voz alta al escuchar a su compañero. Dios, que por favor no fuera a ser lo que se estaba imaginando.
Dimitri no espero una respuesta por parte de ella, sino que la cogió de la muñeca con delicadeza pero firme y la sacó del estudio. Tiberius ni siquiera se dio cuenta de ello. Su concentración en el trozo de pergamino era tal que cualquier sonido a su alrededor le resultaba totalmente insignificante, casi como si no escuchara nada.
Dimitri llevó a Skyler escaleras abajo hasta el salón principal, frente a la chimenea, dónde un lobo reposaba cómodamente sobre la alfombra frente al fuego. Al ver a Skyler, sus orejas se alzaron y se paró en sus cuatro patas.
Gusto en verla nuevamente, mademoiselle.
Skyler dio un salto al oír la voz del lobo tan repentinamente. Su mirada gris se encontró con la negra del animal, reconociéndolo casi al instante.
-Eres el lobo que…
Dimitri suspiró interrumpiéndola. Había leído todo en los súbitos pensamientos de ella, el recuerdo de aquellos tres horribles días en que se habían ignorado completamente.
-Tenía que suponer que habías sido tu quién la había llevado a mi estudio_dijo dirigiéndose al animal_Nunca paras de sorprenderme, Demon. Siempre metiendo tu nariz en asuntos que no te corresponden.
El lobo lanzó un bufido Dígame si no fue una idea brillante, jefe.
Dimitri le alzó una ceja
-Admito que lo fue, aunque no creo que eso sea motivo de tanto alarde_su mano acarició la peluda cabeza aún mientras lo regañaba_Y te he dicho que no me llames jefe. No me debes tanto respeto.
El lobo enseñó sus blancos y afilados dientes Como quieras, hermanito.
Skyler se mordió el labio inferior mientras observaba la escena. Le parecía tan dulce y adorable que simplemente tenía que intervenir para participar en ella.
-¿Por qué le pusiste demonio, Dimitri?_Ella ya había notado que “Demon” significaba demonio en inglés. Dimitri le había dicho que el era un sabelotodo en términos del significado de los nombres y que había decidido colocarles a sus lobos nombres que tuvieran un significado en particular que concordaran con una característica peculiar de cada uno.
El último lobo asesinado se llamaba Agramon cuyo significado era el destructor. Según lo que había dicho, Dimitri le colocó ese nombre porque desde cachorro, ese lobo acostumbraba a destruir y romper todo lo que tocaba. Y ahora este se llamaba demonio, pero ¿Por qué?
-Porque es un verdadero demonio, pequeña_dijo él con una gota de sarcasmo y gracia en su voz_Le encanta incordiarme, a veces cuestiona las reglas, le gusta entrometerse en todo y además es demasiado travieso para mi gusto. Por esa razón no me quedó más opción que ponerle demonio.
Un excelente nombre a decir verdad Dijo el lobo con orgullo.
Dimitri le acarició con verdadera ternura. Demon podía ser desesperante a veces, pero él lo quería mucho. Era su hermano después de todo al igual que los demás.
-Demon, ve a mi estudio y acompaña a Tiberius. No quiero que esté solo_dijo Dimitri enfatizándolo como un favor, no como una orden. Demon odiaba recibir órdenes. Se parecía mucho a Tiberius en ese sentido. Aún así, Demon obedecía por su gran respeto, lealtad y cariño hacia él. Sino, no lo haría.
Dimitri siguió al lobo con la mirada mientras este subía las escaleras, hasta desaparecer por un corredor. Entonces, se giró hacia Skyler.
Ella tragó saliva cuándo su penetrante y fría mirada se posó sobre su rostro. Hacía mucho tiempo que él no la miraba de ésa manera tan dura y fría, como si no tuviera emociones. La sola idea de que todo volviera al primer día en que se vieron hacia un año le hicieron estremecer.
-No temas, pequeña_su mano de mayor tamaño cogió la de ella con una ternura que le dejó sin aliento. La incertidumbre y el miedo que vio en sus grandes ojos grises eran suficientes como para romperle el corazón_No voy a reprocharte nada por si eso es lo que te preocupa. Solo necesito preguntarte una cosa que pase por alto hace unos días atrás.
Las pestañas de ella aletearon como alas de mariposa y un retortijón se dejó sentir en su pecho, justo sobre su corazón que latía a un ritmo frenético y casi desbocado. Por favor que no fuera a preguntarle acerca de…
-Tu ataque, Skyler. Quiero saber que o quién te atacó.
Dimitri no le quitaba la mirada de encima mientras aguardaba por su respuesta. Había sido un irresponsable al haber pasado por alto su horrendo ataque. Se suponía que eso era algo que él debía haberle preguntado justo en el momento en que todo pasó, pero producto del shock vivido al verla tan maltratada, el asunto del pendiente de su madre y su compañera distrayéndolo desde hacía tres días no le ayudaban a su memoria. Era una excusa pobre, siendo que su compañera era su prioridad ante todo, pero era lo único que podía decir en su defensa.
Skyler tragó saliva y se quedó inmóvil, sintiendo la fuerza penetrante de sus ojos azules hasta en la punta de los pies. Cuándo ella pensaba que iba a tener algo de paz ahora que sabía que Dimitri no pensaba preguntarle acerca del pendiente, poco tardó en darse cuenta de que no iba a ser así. Nunca creyó que él le preguntaría al respecto, de hecho ni siquiera ella se había acordado de lo ocurrido, pero ahora que él lo sacaba a conversación, no pudo evitar que su mente reviviera las imágenes de aquel espantoso día.
Se estremeció al recordar la mirada de odio y desprecio de aquel hombre tan parecido a su compañero…no, no un hombre, un vampiro. Aún era capaz de sentir el poderoso ardor en la parte derecha de su bajo abdomen, como si la hubiesen marcado como un hierro al rojo vivo justo dónde su dragón reposaba cómodamente. Nunca en su vida había sentido tal fuego quemándola con un dolor indescriptible siendo que ella había estado cerca de vampiros antes, pero nunca con alguien como aquel. Por alguna razón, ella sabía que este no era cualquier vampiro. Era uno poderoso, astuto y más peligroso que cualquiera al que Dimitri se haya tenido que enfrentar en su vida.
Ella miró a su compañero directo a sus ojos, tomó aire en sus pulmones y simplemente respondió:
-Fue un vampiro
Bien eso por ahora, seguire escribiendo a toda velocidad. emot024 emot024 emot024 emot024 emot024 emot024 emot024
PD: Mas adelante sabran porque Demon es el unico lobo que no esta encerrado como los demas
