Un nuevo extracto del libro Dark Wolf ha salido en el sitio Heroes and Heartbreakers. Aqui esta el extracto traducido por mi, que lo disfruten :)
Josef emergio en medio de la nada directamente delante de Gustoff. El lider intentó apuñalarlo, pero Josef capturo su muñeca en un mortal apretón y le dio vuelta, para que su brazo pudiera cerrarse alrededor de la garganta de Gustoff. El era enormemente fuerte, su apretón inquebrantable. Josef bajó su cabeza hacia el pulso de Gustoff.
-No he comido en un tiempo_susurró_Y necesito sangre para sobrevivir. Una lastima que hayas venido y no hayas sentido mi advertencia.
Hundió sus dientes profundamente en el pulso latiente, permitiendo que Gustoff sintiera un ardiente dolor. Miedo llenó su sanfre con adrenalina, ayudando a borrar el desagradable gusto a alcohol. Gustoff grito y grito, horrorizado ante el vampiro que lo drenaba de su fuerza de vida.
Sus pensamientos se volvieron rigidos, solo observando en absoluto terror.
Siempre has sido bueno en el teatro, dijo Skyler, tratando de no reirse Les estas dando un gran show.
Los ojos de Josef estaban rojos ahora, brillando como gemas gemelas en la oscuridad. Su mirada dio con la Gustoff, haciendo que se pusiera cada vez mas palido. Su cuerpo parecia comenzar a convulsionar. Josef lo dejó caer al suelo. Dos gotas de sangre corrian desde la comisura de su boca hasta su barbilla.
Skyler puso los ojos en blanco. No puedo mantener esta pistola apuntando a el por siempre.
Josef entonces giró su cabeza hacia el borracho que sostenia el arma. Su mirada se fijó en el hombre.
-Luces delicioso.
-No lo soy, no lo soy_El borracho sacudió la cabeza y trató de retroceder tambaleando.
Josef ondeó la mando y el borracho no se pudo mover. Josef flotó hacia el, tomandose su tiempo.
Oh por todos los cielos, ¿es necesario?. Demandó Skyler
Paul se inclinó riendo. Cuando uno de los hombres en el suelo se movió, el le dio otra patada, pero ni aun asi eso lo detuvo en su asombro en las payasadas de Josef.
Si, mi palomita. Es necesario. ¿Cuál es la diversión en ser Carpato si nunca puedes asustar de muerte a alguien?
Josef, tienes una vena malvada.
Josef alcanzó al borracho. Le sostuvo la mano para tener el arma. El borracho extendio el brazo y para su impresión, la pistola cayó a la palma de Josef.
-Gracias_dijo Josef de manera formal. Removió todas las balas para luego pulverizar el arma con solo un apretón de su mano.
Paul se deslizó por el asiento del conductor.
-Vamos Skyler, salgamos de aquí.
Skyler se cambió de un salto al asiento trasero. Josef era alto y necesitaba mas espacio que ella, espacio que solo le daria el asiento de coopiloto. Paul encendió la camioneta y condujo alrededor de los cinco hombres, sacando su cabeza por la ventana, llamó a Josef.
-Vamos, hombre, vámonos de aquí.
Josef lo despidió y se giró hacia la pila de armas. Una por una las destruyó. Despues, ondeó su mano hacia los hombres y toda su ropa desaparecio, dejandolos desnudos en la tierra.
-Es un poco difícil robar y matar cuando estan con el trasero desnudo, ¿cierto?. Estare observandolos. No querran que regrese_Riendose, se elevó en el cielo siguiendo la camioneta.
El estaba todavía riendose cuando se materializo en el asiento del copiloto.
Skyler le abofeteó en la parte de atrás de la cabeza.
-Tomaste sus ropas, ¿cierto?. Dijo ella para beneficio de Paul. Paul se estaba convirtiendo mas adepto a la comunicación telepática, pero el no podia leer los pensamientos como ella podía hacerlo con Josef, a pesar de que el estaba aprediendo muy rapido.
Paul sonrio y levanto su mano para chocar los cinco con Josef.
-Oh si, me encantaria verlos intentar llegar a casa con sus trajes de cumpleaños.
Ambos hombres explotaron a carcajadas.
Skyler puso los ojos en blanco, intentando no reirse con ellos.
-Eres imposible, Josef. Esos hombres tendrán que llegar a casa pasando por su vecindario sin nada puesto_Ella presionó su palma en la boca, pero la risa salió de todos modos.
Los ojos de Paul chocaron con los de ella a traves del espejo retrovisor y Josef se giró en su asiento, sus ojos brillando de diversión. Los tres estallaron en risas.
Skyler había olvidado como era estar con ellos. En la Universidad había hecho algunos amigos, pero ella era vigilada todo el tiempo cuando estaba con ellos, tenía que ser asi. En casa, Gabriel y Francesca eran amorosos y maravillosos padres. Su hermanita, Tamara, era la niña mas adorable del mundo y no podía imaginarse una vida sin ella, pero no podía ser honesta con ellos acerca de su relacion con Dimitri.
Ella no era Carpatiana y no podía esperar hasta que tuviera cincuenta años para estar con su compañero. Ella era humana. Sin Dimitri, ella no habría podido soportado mucha de las largas noches cuando se despertaba cubierta en sudor y los recuerdos de hombres pateandola, lastimandola, golpeandola y usandola. Ella había sido una niña, pero a ellos no les habia importado eso.
Ella había aprendido a mantener sus gritos en silencio, internos, y cuando ella tenia pesadillas hacia lo mismo. Dimitri siempre la habia escuchado. Siempre. El habia venido a ella en la oscuridad de la noche, en sus peores momentos, rodeandola con su amor incondicional. El nunca le pidió nada. El nunca demando sus derechos o le estrelló en la cara el hecho de que el sufría porque ella no estaba lista para ser su compañera.
Y el si sufría. A medida que los años pasaron, Skyler estuvo mas adepta a acceder a la mente y los recuerdos de el. Ella vió claramente la terrible oscuridad cerrandose como un monstruo, susurrando tentaciones, tratando de destruirlo.
Dimitri. Amado. Estoy muy aterrada por ti. Te sostengo cerca de mi, pretendiendo estar segura que estas vivo, mintiendole a mis mas cercanos y queridos amigos, pero en realidad apenas puedo respirar. El terror de estar sin ti se siente tan cerca, tan real.
Ella esperó ahí en la oscuridad, agradecida del asiento trasero de la camioneta, agradecida que Paul y Josef pelearan por la musica y la creyeran dormida. Mantuvo sus ojos cerrados y su respiración baja, pero su corazon martilleaba tan fuerte, tan rapido y seguramente, Josef podría detectarlo. Si era asi, el era lo suficientemente educado para no llamarla en su pretexto.
El silencio se estrechó. No hubo ninguna respuesta.
