Para avisarles que este libro está nadando como la espuma por las aguas digitales. Para ser sincera hace tanto que no sabía nada de está autora y serie en particular que creía que la saga ya se había acabado y que ella ya no escribía.
Me alegra saber que estaba equivocada y que la autora sigue escribiendo tan lindas historias como siempre. Les recomiendo el libro, es una historia muy tierna y conmovedora. No necesitan reerlerse toda la saga si ya no se acuerdan de los personajes. Se entiende sin problema.
Huérfana a los trece años, novia por correo a los catorce, viuda a los dieciséis, Sarah Kennedy ha aprendido a no depender de nadie salvo de sí misma, reservando todo su amor para su hermano pequeño, Conner, y para los halcones heridos que cuida y devuelve la libertad.
Case Maxwell es un endurecido veterano de la Guerra Civil al que una tragedia personal le ha enseñado tres cosas: a ser paciente, a ser un luchador letal y a no amar a nadie ni nadie que pueda morir. Y también que la justicia es ciega. Pero cuando un enfrentamiento con sus acérrimos enemigos, el clan Culpepper, le deja al borde de la muerte, Case en encuentra, al igual que cualquier otra criatura salvaje herida, bajo los tiernos y no deseados cuidados de Sarah.
El destino ha unido a la sanador y al guerrero para enfrentarse juntos a los riesgos y peligros de una dura y magnífica tierra: dos almas atormentadas por un peligroso presente y por los amargos fantasmas del pasado. Pero la intensa emoción a la que tanto Case como Sarah temen, la pasión que arde vivamente en pleno corazón del invierno, es lo único que puede salvarlos verdaderamente, pues juntos buscarán el coraje para enfrentarse al mayor peligro de todos: el amor.
