Me trajo buenos recuerdos de la época en que me leía las novelas de vaqueros de mi padre, de esas que verdaderamente cabían en el bolsillo trasero del vaquero.
Bueno, esta serie está en la misma línea. Es entretenida y no pretende mucho más, pero destaca por mantenerse coherente a pesar del paso del tiempo, cosa que no consiguen la mayoría de los libros de CF.
Me sorprendió también que la protagonista es una mujer, una mujer liberada, sexualmente activa y decidida; fuerte, más fuerte que los hombres que la rodean; brillante y valiente, comandante por mérito propio.
Ummm, hasta a lo mejor es demasiado. Donde más se nota esta nota de "a duro" es en que la protagonista siempre tiene la solución, un plan secreto.
El centro de las historias es bueno.
El Imperio crece hasta descontrolarse y contaminarse, desmoronándose bajo el peso de la corrupción. Se desmigaja en planetas aislados, y desde la Tierra surge El Orden Estelar, una organización con fuertes convicciones de libertad e independencia. Unidos, pero sólo los planetas votan unirse.
En este marco, la protagonista es una joven oficial que se incorpora al servicio y empieza a tener aventuras en el espacio. Aventuras ligeritas en las que prima la acción por encima de la ciencia y como dije antes, en las que la protagonista no pasa penas porque ella es más lista que nadie.
En algún punto de la serie surge un personaje masculino que acaba estado supeditado a ella en rango, carisma e inteligencia. El chico no desmerece, pero ella todavía brilla más, y su amor se resuelve muy fácilmente para mi gusto.
Es en este punto donde aparece "el bueno" que note más el tono facilón. La dificulta que supone la diferencia de rango entre los protagonistas la solucionan sacándose un as de la manga en plan guión de serie comedia.
En su momento calculo que esta serie sería el no va más. Ahora da algo de pena que no se explotara más y mejor.
De todos modos es una buena lectura para rememorar aventuras sencillas en "blanco y negro".
