Ahora, la ardiente lealtad y amor de uno de los Centinelas pueden probar ser sus mejores armas.
Durante nueve años, Nika ha tenido una meta: Salvar a su hermana más joven de los Synestryn que la mantienen cautiva. Ahora el vínculo mental con la desaparecida hermana de Nika está desapareciendo y el tiempo se acaba. Pero el único hombre que puede desbloquear el noder dentro de ella se ha ido y nunca volverá dejando a Nika sola para rescatar a una hermana que todo el mundo cree muerta.
Madoc se juró a si mismo que nunca entraría de nuevo en Dabyr. Por su alma que está casi muerta, y sus temores a lo que quizás les haga a aquellos que juró proteger... especialmente a Nika. Si él la acompaña al reino de los Synestryn, su prohibido deseo por ella podría liberar al salvaje monstruo con él. Pero la necesidad de Nika por rescatar a su hermana pronto se encontrará mezclada por su pasión por Madoc, mientras que la única llave de alzarse con la victoria puede quedar por fin a su alcance...
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